Adaptación cultural y validación de escalas

Es habitual que en investigación se deban medir diferentes condiciones (síndromes, constructos) o variables, muchas de las cuales son desenlaces relevantes. Algunas de estas medidas son muy sencillas, ya que hay mecanismos directos y objetivos para llevarlas a cabo, como en el caso de la medición de estatura con una cinta métrica, la evaluación de la anemia con un cuadro hemático, o la del peso mediante una báscula en kilogramos. Otras variables o condiciones, tales como la calidad de vida, la depresión, la ansiedad, el tipo de personalidad, el dolor o la satisfacción con la vida, son más abstractas, más complejas, y no se pueden medir directamente. Muchas de ellas se componen de un mayor número de categorías, dominios o factores que las representan, por lo cual no tienen una medida directa y requieren mediciones especiales (escalas) que contemplen su complejidad.
Los proyectos de investigación que deben evaluar las mencionadas condiciones o variables recurren a menudo a escalas o instrumentos de medición para evaluarlas. En este capítulo se profundizará en la adaptación y la validación de escalas existentes, así como en el desarrollo de novo de algunas de ellas en caso de que no existan o de que las existentes no sean adecuadas para el propósito del estudio. Para este último caso, se debe hacer un proceso que culmina con la selección de una serie de preguntas relevantes (ítems) tras un proceso de adaptación y validación.
Una escala (instrumento de medición) se define como una colección de ítems o preguntas que miden algún domino o categoría (factor en términos estadísticos), y que, a su vez, conforman una condición (síndrome, constructo, variable) definida e identificada.