Caracterización de espacios efectivos de liderazgo en emprendimiento comunitario y económico por parte de mujeres en siete consejos comunitarios de Buenaventura

En Colombia, al igual que en todo el mundo, las relaciones de género están en permanente transformación. La participación de las mujeres se hace cada vez más visible en espacios económicos y políticos, tanto en espacios de ciudad como en el mundo rural. Aspectos como la gobernanza de los recursos naturales y productivos, la representación política comunitaria y la interacción con la institucionalidad estatal han sido un claro ejemplo de este aumento de la participación femenina en el país. Por lo tanto, lo que se consideraban como espacios netamente agrícola para la generación de ingresos y uso del territorio, han dado paso a una multiplicidad de actividades que desarrollan por igual hombres y mujeres en la solución de sus necesidades prácticas.Los territorios colectivos afro-colombianos no son ajenos a esta situación. Dinámicas como la migración por asuntos económicos, el mayor acceso a servicios de salud y educación, así como el incremento de vías de comunicación, ha generado nuevos espacios de producción económica tanto para hombres y mujeres. Sin embargo, aún condiciones asociadas a la ¿territorialidad colectiva¿ no necesariamente se traduce en el aumento de la capacidad de agencia por parte de las mujeres a nivel local, considerando que aún se presentan restricciones a el acceso a mercados formales, a créditos o a apoyo a emprendimientos locales. En el Valle del Cauca, específicamente en Buenaventura, se encuentran más de 45 consejos comunitarios en la actualidad, comprendiendo un área aproximada de 350 mil hectáreas, con una población de 49.519 personas, cerca del 12,15% de la población del municipio. La titulación colectiva en Buenaventura ha sido una de las más efectivas dado que, casi la totalidad de la solicitud de títulos colectivos ha obtenido resultados positivos. Sin embargo, la propiedad de la tierra colectiva no ha determinado necesariamente el mejoramiento de las condiciones económicas y productivas de sus habitantes. En general, en este municipio se presentan índices muy altos de pobreza combinados con altas inversiones en infraestructura. En cifras generales, de acuerdo al DANE en el 2017, la tasa de desempleo se ubicó cerca del 18%, pero esta condición responde principalmente a indicadores aplicados a la ciudad, dado que, la población con empleo se concentra en actividades como comercio, hoteles, restaurantes, transporte, almacenamiento, comunicaciones y construcción, actividades que claramente suceden en la ciudad y no en los sectores rurales, en los cuales están los territorios colectivos. El 6 de Junio del año 2017 se firmó el acuerdo que finalizó durante un paro de más de 2 semanas en Buenaventura, aunque este se sintió principalmente en la ciudad, gran parte de los habitantes rurales de este municipio (indígenas, afro-colombianos y campesinos) se unieron a esta iniciativa con el fin de mejorar sus condiciones sociales y económicas. Esta situación hizo visible los altos niveles de pobreza y marginalidad existentes en este puerto y su zona rural, y definió aspectos concretos a ser resueltos en el corto plazo por medio de inversiones sistemáticas del estado. Este acuerdo y otros similares han cobrado un lugar en la discusión nacional sobre el mejoramiento de las condiciones de los habitantes rurales. El Estado se ha propuesto en términos generales responder a las necesidades planteadas por los habitantes del municipio de Buenaventura. No obstante, uno de los principales obstáculos para esta resolver estas situaciones, como ha sido mencionado anteriormente, radica en las limitaciones y el poco conocimiento que hay de las posibilidades económicas y de empoderamiento por parte de las mujeres locales a partir de sus necesidades, percepciones y contextos de realidad.Así, esta investigación se sitúa en esta problemática y busca entender, a partir de una detallada caracterización de las condiciones, necesidades prácticas, retos e intereses estratégicos de las mujeres de los siete consejos comunitarios mencionados, cuales serían los aspectos fundamentales que podrían permitir, por una parte, fortalecer el papel de las mujeres en los esquemas de gobernanza de los territorios colectivos, y por otra parte, identificar opciones de innovación social y económica que faciliten el empoderamiento de las mujeres en estos territorios.Por ello, tendrá como punto de partida el análisis de los actores y de los factores estructurales de los territorios colectivos que potencian y/o limitan la participación de las mujeres en el uso, acceso y control de recursos naturales, los que a su vez se constituyen en una base importante de diseño de mecanismos que permitan mejorar las condiciones económicas y de liderazgo de las mujeres a nivel territorial.