Adaptación del programa SMSpapás para padres colombianos: Estudio piloto de factibilidad

Proyecto: Investigación

Detalles del proyecto

Descripción

Los programas enfocados en el proceso del cuidado del recién nacido y la relación con los padres, buscan mejorar el apego y disminuir los niveles de ansiedad y depresión en los cuidadores; que últimamente, pueden impactar negativamente en el desarrollo infantil. Se ha evidenciado que las intervenciones desde el campo de la salud mental generan beneficios fortaleciendo las relaciones positivas en el periodo perinatal (1). La mayoría de estas intervenciones se han enfocado principalmente en la madre dejando de lado a los padres. Se ha evidenciado que las instituciones de salud e incluso los mismos profesionales consideran el papel del padre como secundario en el cuidado del recién nacido. A pesar de lo anterior, el rol del padre es igual de importante y necesario para un adecuado desarrollo infantil. Es necesaria la sensibilización sobre la salud mental de los padres, toda vez que el periodo peri y postnatal ha sido identificado como un detonante de estrés paterno con importantes repercusiones a nivel individual y también en la salud de la madre y el bebé (2). Los padres tienen gran importancia en la ayuda a los recién nacidos en el reconocimiento de las emociones. Las respuestas que estos tengan frente al estrés del niño, servirán como elementos fundamentales para la configuración de las estructuras cognitivo-afectivas; por lo que problemas en la salud mental de los padres podrán generar elementos de ansiedad o estrés y llevar a la aparición de síntomas afectivos y comportamentales en la infancia, con un riesgo de perpetuación en la adultez (3). El nuevo rol y la transición hacia la paternidad están cargados de cambios, expectativas, estrés, aparición de sentimientos negativos y sensación de extrañeza. Existe en la actualidad evidencia que demuestra problemas de salud mental en el hombre en transición a la paternidad y en su relación con el recién nacido y la madre. Un estudio que utilizó la escala de depresión postnatal de Edimburgo (EPDS por sus siglas en inglés) en parejas en el periodo postnatal, mostró una prevalencia de depresión del 27.5% en las madres a las seis semanas posparto y de 25.7% a los seis meses posparto; en relación a los padres, la prevalencia fue de 9.0% a las seis semanas y de 5.4% a los seis meses posparto; siendo más propensos aquellos padres cuyas parejas también eran sintomáticas. A pesar que las madres reportaron un mayor número de síntomas, el tipo de sintomatología fue similar en hombres y en mujeres (4). En la Encuesta Nacional de Salud Mental del 2015 en el apartado de trastornos mentales en la población infantil, se relacionaron factores de riesgo familiares (nivel de educación, edad, estatus socioeconómico, condición laboral, estado civil, consumo de alcohol o de sustancias, trastorno mental o ideación suicida parentales) con la prevalencia de trastornos mentales en niños y adolescentes (5). Una revisión de tema australiana, puso en evidencia que los hombres adultos en edades fértiles tenían altas tasas de malestar emocional, enfermedades mentales y consumo de sustancias; esto es importante ya que se ha evidenciado que hijos pequeños de padres con enfermedades mentales graves o consumo de sustancias, tienen mayores tasas de mortalidad infantil y de sufrir enfermedades mentales a largo plazo (3). Desde un punto de vista adaptativo, existe un proceso de retroalimentación entre el padre y el recién nacido, de tal forma que eventos negativos como la presión por satisfacer las necesidades del hijo, van a impactar directamente en el bebé (6). De igual manera, fomentar eventos positivos -como el sentir los movimientos fetales o presenciar el nacimiento- fortalecerán el vínculo entre el padre y el bebé, permitiendo un apego más seguro y además, que el padre tenga una percepción más positiva con respecto a su salud durante el periodo perinatal (7). Se realizó un modelo que buscaba predecir el estado de salud percibido en el periodo perinatal (utilizando el cuestionario de percepción de salud y la Escala de Sentido de Competencia Parental), que mostró que cualquier intervención que aumentase la competencia parental y diera un mayor sentido de control, reduciría la ansiedad y la depresión e indirectamente mejoraría la percepción de salud (8). Los avances en Colombia en cuanto a cobertura de Internet y telefonía móvil son notorios, más del 50% de la población usa teléfonos inteligentes, la mitad de la población (23,8 millones) es usuaria de internet móvil y la penetrancia de la tecnología se acerca a los niveles promedio internacionales. Las mujeres en edad reproductiva y sus parejas son usuarios frecuentes del Internet, las redes sociales y los aplicativos móviles (9). De la mano, la telemedicina se ha posicionado como una herramienta válida para acceder a valoraciones por especialistas a pesar de las barreras geográficas; aumentando el acceso a los sistemas de salud, ampliando la cobertura de atención y el seguimiento a familias en periodo periparto ya que, a pesar de que este periodo tiene alta cobertura, hay poca presencia de programas de salud mental (10) y muchas mujeres no buscan atención presencial en salud perinatal por temor a ser separadas de sus hijos (11). Con el creciente uso del Internet y los dispositivos móviles, aparecen nuevos servicios aplicables para salud mental y perinatal (12). En el campo de la salud mental, estudios clínicos han demostrado la efectividad de intervenciones con llamadas telefónicas (13), mensajería de texto (14) (15), aplicaciones (16) (17) (18) y páginas web (13) para la tamización (19), el tratamiento (20) (21) (22) y la monitorización (23) de la depresión postparto. La terapia cognitivo comportamental virtual mejoró significativamente los niveles de estrés, depresión y ansiedad según lo demostrado por un reciente metaanálisis (22). Es decir, es necesaria la sensibilización en la atención en salud mental perinatal de los papás y el uso sistemático de la tecnología -como medio efectivo para aumentar la cobertura en salud perinatal- permitirá una mayor identificación, tratamiento y seguimiento de las dificultades que surgen en estas etapas. Especialmente enfocado en estas necesidades, se diseñó un estudio en Australia llamado SMS4DADS, el cual utilizó la tecnología de los teléfonos celulares para dirigirse a los padres de Queensland, Australia, en transición a parentalidad; en este estudio, se envió un grupo de 184 mensajes de texto cortos, para apoyar las relaciones del padre con su bebé, su parejas y su propio autocuidado durante el periodo posnatal; este estudio demostró que este tipo de intervención era factible y aceptable en este tipo de población(24); una segunda versión de este proyecto ya se ha lanzado en el sur de Australia, con fondos del Gobierno del Sur de Australia, vía la Comisión de Salud mental y también se ha lanzado un estudio para familias en Victoria; así mismo hay dos estudios piloto, uno con padres jóvenes aborígenes; y otro en New Nueva Gales de Sur (25). Este mismo estudio tuvo otro proyecto de adaptación para madres con enfermedad mental severa y sus parejas desde el embarazo temprano hasta las 24 semanas (26). Para más información visite: https://sms4dads.com/About/Project.aspx
EstadoFinalizado
Fecha de inicio/Fecha fin05/05/2031/07/22

Financiación de proyectos

  • Interna
  • PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA